Herencia de acciones

Recibir una herencia no solo implica el aumento de tu patrimonio con los bienes recibidos. También involucra la aceptación de las responsabilidades y obligaciones que los acompañan.

Por eso, si eres heredero y dentro del conjunto de bienes que te serán cedidos existen acciones, es importante que te informes bien para saber cómo actuar. Estas también vienen responsabilidades fiscales.

En torno a este tema pueden surgir dudas que te ayudaremos a aclarar. Si te estás preguntando cómo se reparten las acciones heredadas, cómo se tributan y cómo es el proceso para venderlas, aquí te lo explicamos con detalle.

¿Cómo es el cambio de titularidad tras una herencia de acciones?

Lo primero que debes saber es el proceso a seguir para realizar el cobro o adjudicación de las acciones que has heredado. Para esto, es obligatorio realizar el cambio de titularidad. Pero, ¿en qué consiste un cambio de titularidad?

El cambio de titularidad es un trámite a través del cual los herederos deben acreditar ante la entidad correspondiente que se les han cedido las acciones. Igualmente, deben demostrar que han cumplido con las obligaciones fiscales testamentarias.

Debes presentar a la entidad depositaria el acta notarial que demuestre legalmente que existe un parentesco con el titular de las acciones. Para evitar confusiones y retrasos en estos trámites lo ideal es buscar asesoría de expertos en gestión patrimonial.

De igual modo, debes saber que la ley vigente obliga a las entidades bancarias a bloquear las cuentas corrientes y cuentas de valores de un titular, tan pronto se notifique su fallecimiento. No obstante, tal bloqueo solo se permite hasta el momento en el que recibas la escritura notarial que certifica la aceptación de herencia.  

Solo después de tener dicha certificación se puede hacer el reparto correspondiente o posibilitar el pago del dinero en efectivo a los herederos. Obviamente, esto incluye tanto a las acciones como a otros bienes o dividendos.

Una vez esté liquidado el impuesto de sucesiones y se hayan llevado a cabo los trámites obligatorios para la regularización de los bienes adquiridos por herencia, obtendrás la titularidad de las acciones.

¿Cómo se reparten las acciones en caso de varios herederos?

Si se da el caso que sean varias personas las que heredan un conjunto de acciones, se deberá realizar la partición de toda la herencia. Solo así es posible determinar cómo repartir las acciones que eran parte del patrimonio del fallecido.

La partición puede ser ejecutada por un testador o, si se prefiere, por los propios herederos. Puede ser de mutuo acuerdo o a través de un funcionario especialista designado por el juez.

No obstante, la repartición de las acciones de herencia puede generar algunos problemas entre los herederos.

Sobre todo, cuando varios herederos reciben una parte indivisa de dichas acciones. Esto puede producir desencuentros en el momento de llegar a una decisión unánime ante lo que se hará con las acciones, si se van a vender o no, por ejemplo.

En estos casos debes tener en cuenta lo siguiente:

• La Ley de Sociedades de Capital en el artículo 126 indica que en caso de copropiedad sobre acciones, los involucrados tienen que elegir una persona que ejerza los derechos de socio. Los demás deberán actuar de forma solidaria frente a las obligaciones que se generen.
• Para evitar mayores complicaciones, cuando se procede a la partición de la herencia se pueden separar lotes. de esta forma, destinas uno a cada heredero y cedes la titularidad exclusiva de cada parte de las acciones.
• Es importante resaltar que ser titular de acciones no solo ofrece beneficios económicos. También exige participación en asambleas o ejercer derecho de voto. Igualmente, implica obligaciones tributarias.
• En empresas familiares, la distribución de las acciones entre los herederos debe estar bien pensada. Un reparto desigual puede dar mayor poder sobre la empresa a una persona en particular.

Existen otros problemas que se pueden generar, pero en estos casos lo más indicado es solicitar el consejo de profesionales en el área jurídica y financiera. De esta forma, se podrá llegar a una decisión que sea conveniente para todos los herederos.

¿Cómo tributan las acciones heredadas?

De acuerdo a lo establecido en las leyes españolas, específicamente, en el artículo 989 del Código Civil,  las acciones heredadas se adquieren de forma derivativa. Esto quiere decir que una vez el heredero realice la aceptación de la herencia esta se hace efectiva. 

No obstante, en el momento de la muerte del propietario, los dividendos que generen por las acciones a partir de esa fecha, deben ser declarados ante el IRPF de los herederos. Así lo establece la Consulta Vinculante V2332-15 derivada de la Dirección General de Tributos.

Si los dividendos han sido cobrados por la persona fallecida antes de morir, es necesario declararlos en su última renta. Es esencial que los herederos realicen estos trámites para evitar problemas futuros.

¿Cómo vender las acciones heredadas?

Si no tienes experiencia con el manejo de acciones y deseas venderlas, lo más recomendable es consultar a un experto financiero antes de hacerlo. Esta es una cuestión donde hay muchos factores a considerar.

Lo primero es calcular las ganancias o pérdidas que se pueden generar al venderlas. Para eso, es muy recomendable pedir consejo de un grupo de profesionales especializados en la gestión del patrimonio y planificación financiera que te puedan ofrecer un servicio personalizado.

Pero, ¿cómo pueden afectar a tu patrimonio unas acciones heredadas? Los dividendos generados por este tipo de valores se determinan a través de la diferencia entre el valor de transmisión y el de adquisición. Dicho de otro modo, el valor de adquisición de esas acciones responde al valor de cotización que las acciones tengan el día de fallecimiento del titular.

Por eso, es necesario saber cuál fue el valor de cotización de esas acciones en el cierre de Bolsa del día de la muerte del titular. Ese será el coste de adquisición de las acciones. De modo que, si vendes a un precio mayor, Hacienda determinará que has tenido una ganancia patrimonial y deberás tributar la plusvalía.